¿Sabías que Valencia es una de las comunidades con más prevalencia de Leishmania en España?
La Leishmaniosis es una enfermedad parasitaria que afecta tanto a humanos como a animales, siendo especialmente muy común en perros no vacunados y puntualmente en muy pocos gatos.
Se transmite a través de la picadura de un mosquito llamado flebotomo. Esta enfermedad puede ser grave y, en algunos casos mortal para nuestras mascotas por tanto es muy importante detectarla y tratarla a tiempo.
Puede manifestarse en dos formas principales: cutánea y visceral.
La forma cutánea afecta a la piel, produciendo úlceras y lesiones, mientras que la forma visceral puede dañar órganos como el riñón y el hígado. Algunos de los síntomas comunes incluyen: pérdida de peso progresiva, pérdida de apetito, lesiones cutáneas que no cicatrizan, crecimiento excesivo de las uñas, problemas oculares, debilidad, diarrea, vómitos, etc.
La prevención de esta enfermedad se basa principalmente en el control de vectores mediante desparasitantes externos y la vacunación conjunta.
Esta vacunación se puede administrar a partir de los 6 meses de edad. Es cierto que no hay nada 100% efectivo contra la leishmania pero la sintomatología que padecen los animales vacunados en caso de contagiarse es mucho más leve.
En Atalaya nos tomamos muy en serio la prevención de esta enfermedad y recomendamos testar y vacunar anualmente a nuestros pacientes.